Biometano Sesma S.L. es una empresa 100% propiedad de la sociedad Glide Energy S.L., dedicada al desarrollo e inversión de proyectos de producción de biometano y biofertilizantes, así como de otras energías renovables en España.
La planta que prevé impulsar en Sesma se dedicará al tratamiento y valorización de subproductos animales y vegetales, así como de residuos de la industria alimentaria de la zona, para producir tres productos mediante un proceso de digestión anaerobia: biometano, un gas renovable que como vía principal se inyectará al gasoducto para su consumo local en sustitución del gas natural; digerido con valor fertilizante, que se podrá vender y utilizar en la agricultura local; y CO2 de origen biogénico, que se utilizará para sustituir este compuesto en industrias locales, como en procesos de depuración de aguas.
Los tres productos obtenidos se utilizarán principalmente en el área geográfica donde se implantará esta planta en Sesma, lo que profundiza en el carácter circular de la iniciativa.
Más en detalle, el proyecto se basa en la recogida de subproductos ganaderos (purines, estiércoles, gallinaza, etc.) y subproductos agrícolas locales (restos de cosechas y de la industria agroalimentaria) para valorizarlos mediante un proceso de digestión anaerobia, también conocido como biometanización, que es un proceso biológico que tiene lugar en ausencia de oxígeno, en el que parte de la materia orgánica de los residuos orgánicos se transforma, mediante la acción de los microorganismos, en una mezcla de gases (biogás), constituido principalmente por metano y dióxido de carbono y otros gases en pequeñas cantidades (amoniaco, hidrógeno, sulfuro de hidrógeno, etc.).
La empresa calcula que su actividad evitará cada año el vertido directo al campo de unas 80.000 toneladas de purines y 50.000 toneladas de estiércoles y gallinaza. Así, a lo largo de la vida útil del proyecto (25 años) se evitará la aplicación de un total de 3,25 millones de toneladas de residuos ganaderos al campo.
El proyecto, que Sodena ha acompañado y facilitado contactos con los diferentes departamentos del Gobierno de Navarra, prevé una inversión total de 28,7 millones de euros, destinados principalmente a la planta (25,2 millones). Supondrá además la construcción de un gasoducto, que tendrá un coste de 526.020 euros.
El proyecto prevé la creación de 12 empleos directos y 35 empleos indirectos durante todo el periodo de operación de la planta, que se estima superior a 25 años. En la etapa de construcción de la instalación se prevén crear 50 empleos directos.