Instalada la conducción principal del Canal de Navarra que llevará agua a los campos de Sesma
La conducción principal del Canal de Navarra que permitirá llevar agua de calidad a campos de cultivo de Sesma ya ha sido instalada en su totalidad. El consejero de Cohesión Territorial, Bernardo Ciriza, y la alcaldesa de Sesma, María Rosario Echávarri, han comprobado el avance de los trabajos de construcción de esta infraestructura a su paso por el término municipal de la localidad.
Se trata de 2,7 kilómetros de tubería de acero que constituye la conducción principal de la red de riego, cuya puesta en servicio permitirá convertir en regadío este año un total de 1.290 nuevas hectáreas de cultivo con agua de calidad proveniente de Itoiz.
El consejero Ciriza, que ha estado acompañado en su visita por el subdirector de INTIA y responsable del área de regadíos, Joaquin Puig; el responsable de la empresa concesionaria Aguas de Navarra, Francisco Iribarren; así como personal técnico de INTIA, ha destacado que "la construcción de la ampliación de la primera fase del Canal de Navarra en Tierra Estella avanza de manera progresiva", y ha recordado que "el Canal de Navarra constituye una infraestructura estratégica para el desarrollo de nuestra comunidad, que genera cohesión social y territorial, y permite a Navarra avanzar en el desarrollo económico".
Trabajos en la red de riego a presiónCabe recordar que las obras de construcción del Canal de Navarra a su paso por Sesma dieron comienzo el otoño pasado, con un plazo de ejecución de 12 meses. En una primera fase, se ha priorizado la construcción de la red de riego a presión.
En estos momentos, además de trabajar sobre la conducción principal, se está trabajando también en la instalación de los ramales secundarios de distribución, que abastecerán de agua a las distintas parcelas. Además, los trabajos en la red de riego contemplan la colocación de 216 hidrantes.
Las actuaciones se completarán con la construcción de la red de desagües y la red de caminos para el acceso a las parcelas, que comenzará próximamente. Ésta tiene una longitud total de 65 kilómetros de los que la mayor parte se encuentran ya construidos, pero es preciso ampliar su anchura.
Por último, se proyecta una red de colectores de 47 kilómetros de longitud, cuya misión es la de evacuar las aguas pluviales y el agua de escorrentía de las parcelas de riego.